29 de junio de 2010

La Carlitos

Hace más de veinte años, cuando llegué a este barrio lo primero que me llamó la atención fue un tipo grandote, panzón de más de 1,80 m, barbudo y desalineado que paseaba todas las tardes a su perra ovejera alemán.Su presencia se imponía y hasta daba un poquito de miedo.
Un día pasé por al lado suyo y con una voz afeminada y melodiosa me saludó dandome la bienvenida al barrio y ofreciendo sus servicios como profesor de ballet,instructor de streching, masajista y enfermero.
La Carlitos resultó ser una diva en un cuerpo de matón.
Siempre estaba en la puerta de su casa o charlando con alguna vecina.
Siempre amoroso con los animalitos del barrio, gatitas que tenían cría, perritos abandonados, él siempre sabía dónde, cuándo y cómo.
Cada vez que me veía venir caminando por Alberti, faltando unos diez metros para pasar a su lado me decía:" Aaayyy ahí vieeene mi amiiiigaaa ja ja.." y siempre me detenía un ratito a charlar con él.
Me contaba sus anécdotas, me preguntaba siempre en qué andaba y hasta me ha sorprendido con un paso de ballet e instrucciones para elongar correctamente.
Siempre allí, con su joggin y sus remeras descoloridas, pero siempre perfumado y coqueto a su modo.
En tantos años se convirtió en el anfitrión de la esquina, en el compinche del chisme y en el guardián que me ha acompañado hasta la puerta de casa alguna noche volviendo tarde de trabajar.
Hoy me enteré que Carlitos murió el sábado.
Lo vieron ir a comprar cigarrillos y conversar con una amiga como siempre.
Luego de una hora su teléfono sonaba y nadie atendida.
Su vecina lo fue a buscar y lo encontró en el piso, azulado y ya muerto.
Mi vecino la Carlitos se murió y no me pude despedir.
No pude decirle cuánto apreciaba sus charlas, sus saludos exagerados y sus mohines de diva.
Y cuánto voy a extrañar esas risas. Y su sola presencia en la esquina.
Que Ella te muestre el camino. Y que danzando tu alma la siga, envuelta en risas y en puro amor.
Adiós Carlitos lindo, buen viaje.

1 comentario:

Marcela dijo...

Dejan su marca esas personas. Hay que recordarlos así, tan especiales.
Un beso.